La soledad pega más fuerte cuando te enfermás
Los Dios-Patria-Familia tienen razón en algo: tus mascotas no te traen el desayuno a la cama cuando estás mal.
Todas las semanas me pregunto qué mierda voy a escribir esta semana. Todas las semanas tengo ganas de no escribir y decir “sí, finalmente me rendí con esa pelotudez del substack, otro proyecto abandonado”. Todas las semanas digo, esta vez tengo que escribir algo un poco más intelectual (??). Todas las semanas digo, esta vez sí, voy a escribir con tiempo, recursos, citas, me voy a mandar UN PAPER. Todas las semanas digo, pero ese no es mi estilo, yo soy eeeh, mmm, quien soy, no? Una millennial que quería ser Lena Dunham y que vomita cosas en forma de escritura. Todas las semanas digo bastaaa de escribiiiir de lo missssmo te pido por favor que no hables de tu depresión o de no tener un buen laburo o de la última vez que te ghostearon o de todas esas juntas. Todas las (últimas) semanas me digo por favor no escribas de e ele a ele e eme a ene. Todas las semanas algo termino escribiendo. Todas las semanas odio lo que escribo. Todas las semanas deseo no haberme auto impuesto esta idea del newsletter. Todas las semanas me digo y bueno, y sino, ¿Qué hago?
Esta semana que pasó estuve enferma. Así que me pregunté todo eso y mucho más. Hacía rato no tenía tanta fiebre tantos días seguidos. Ni cuando tuve COVID pre vacunas la pasé tan mal. Pero como en ese entonces tuve que pasar sí o sí 15 días encerrada sola en casa, me agarró algo mucho peor y que continúa al día de hoy: la adicción a tik tok. Ugh.
Crónica de una enfermedad
Algunas ideas sueltas sobre enfermarse, vivir sola, sentirse sola y el capitalismo (metía esa).
Perdés plata
Yo cobro presencialidad. Sí, enfermarte va a descuento. Y me tomé cuatro días. Chau al 100% de la presencialidad. También pensé que iba a estar bien al tercer día e iba a poder tener terapia. Pues no, y tuve que pagar igual. Tuve que cancelar una clase que tendré que dar otro día. Comprar medicación ($$) que no preveía. No pagué Uber ida y vuelta a la guardia porque me negué a ir y optar por pensar que era tratable con médicos en línea de dudosa procedencia. El médico a domicilio $10 mil cash.
¿Qué voy a hacer cuando se muera mi mamá?
Parezco un varón dependiendo de mi mamá. Pero siempre sentí que a la única persona a la que realmente le importo es a mi mamá. En *ciertos días oscuros* pensaba que si no estaba más, el resto iba a seguir adelante más o menos pronto, pero ella no. Y al revés un poco pienso igual. Vivo sola. SOY SOLA. Vino dos veces a traerme cosas y ver como estaba. Ve todos los días mi horario de conexión a ver si estoy viva je (único motivo por el que no lo saco) (sé igual que Mariano también a veces me ve el horario de conexión). Una de mis *ídolas*, la directora belga Chantal Akerman, le dedicó toda su obra a su madre. Y una vez que ella murió, Chantal se suicidó. Un poco la entiendo. (no me voy a matar, recuerden que todo lo contrario, desde el año pasado le tengo miedo a la muerte) (lo pueden leer acá).
¿Debí haber estudiado medicina?
Me enganché con la serie The Pitt, con y de Noah Wyle, el doctor Carter de ER, donde otra vez hace de médico de emergencias, pero esta vez como jefe. Me enamoré otra vez de él. Time is a flate circle. Y me pasó lo mismo que cuando veía greys anatomy a los 18: tendría que estudiar medicina. Me gusta tratar con gente, me gusta la adrenalina, me gusta estudiar y leer, me gusta un trabajo donde no mirás pantallas. Me gustan las personas con ambo ahre. ¿Es muy tarde para anotarme en una tercera carrera a los 36? Lo voy a pensar.
¿Por qué no aprovecho más el tiempo?
Es tremendo porque en general siempre me pregunto por qué no soy más productiva y todo eso, pero cuando estoy enferma tampoco me doy un descanso de esos pensamientos. Todas estas horas ENFERMA, pensaba, debería aprovechar para ver referencias audiovisuales para mis proyectos. Hasta me hice una lista. Tengo que ponerme a leer libros. Basta del celu. A escribir ese libro y esa película que tenés pendientes. ¡Ponete con el newsletter! La presión de no ser una fracasada no toma paracetamol. Que pesadaaa. Encima obvio no hago casi nada y me siento culpable. Buenísimo. Enferma, culpable, poco productiva, fra ca sa da.
¿Y si sí me quedo sola para siempre?
Vivir sola y enfermarse es uno de los momentos donde una se siente mas expuesta a la soledad. Nadie te va a comprar el jarabe para la tos (bueno mi mamá sí), nadie te trae el desayuno, nadie te hace un tecito. Deja gordi, vos quedate acostada que yo te hago unas tostadas y lavo los platos. NO EXISTE. Las boludas de las gatas no saben hacer nada.
Encima todavía tengo el corazoncito achicharrado por la último desilusión amorosa y junto antes de que me suba la fiebre, lo borré de mis redes sociales. Es una boludez, pero se siente sacar una curita más. Sola, desilusionada, enferma. Pensando que me podría estar haciendo un tecito él. Que igual no. Si era un forro.
Resistirse a la compra online
Estar encerrada me retrotrae a la pandemia. Y que hacía en la pandemia: compras compulsivas por internet. Encima fue el hot sale. Tuve que poner una resistencia increíble. Pero a veces soy débil. Por ejemplo, instagram me mostró la publicidad de una remera lila de sailor moon. Demasiado específico. No la compre porque no había de mi talle. Pero sí me compré una violeta de Jean jeje.
Y ahora tengo que volver (al infierno de mi cabeza)
Se acerca, se acerca, Ya la veo venir. Tuve mucho tiempo para pensar y volver al mismo lugar: ¿Que hago con mi vida laboral? ¿Qué salidas tengo? ¿A qué me dedico? ¿Cómo llegué a este momento donde me siento una fracasada sin salida? ¿Acaso me tengo que rendir?
Aaaaah (¿Grito o suspiro? Un poco de ambos).
Otra vez las ganas de desaparecer misteriosamente.
Y la pregunta que me hice constantemente mientras estaba enferma.
¿Va a volver?
No. No va a volver.
Gracias por leer,
Flor
Flor escribí de lo que se te cante el pingo si cualquier cosa que pones acá me encanta leerrrrrr
aún no termino de leer todo, pero ya me caíste muy bien!