Terapia y escritura
En medio de un ataque de ansiedad, escribí un texto lastimoso y mediocre sobre cómo se siente vivir con un trastorno de ansiedad y depresión. Se lo mandé a mi amigo MM y me dijo que sí, que era lastimoso. Lo releí y me pareció un bodrio. Borrón y cuenta nueva. Los ejercicios de ansiedad y escritura mejor guardarlos para la privacidad. Re que no estoy guardando nada para la privacidad.
Obsesiva pero no obsesiva compulsiva
Hay algo que me pasa desde chica: me obsesiono con cosas. Puede ser un hecho o una persona; me atraviesa y no puedo salir de ahí. Me produce un nudo en la garganta que me corta el hambre. Generalmente esa obsesión es algo mundano; una persona que me ghosteó, un trabajo que no puedo tener, haber hablado con mi ex. Alguna amiga que me lastimó. Cómo hacer para dejar de ser oficinista. Una vez me obsesioné con la carrera de medicina, que era mi verdadera vocación, y pasé horas y horas en un foro de estudiantes de medicina (¿?). Ojalá me obsesionara con agarrar la pala, ¿no?
La medicación puede parar con este círculo vicioso y ansioso. No es pensar mucho en eso: es solo pensar en eso. Yo pensé que ya estaba rehabilitada, pero no. La última crisis me devolvió a mis viejos hábitos obsesivos. Y la última obsesión que me agarró es un poco más oscura: estoy obsesionada con la muerte. Y no de una manera suicida (ahora); es de una manera existencial que, les digo, es todavía peor. Es algo que mientras viva no va a tener respuesta. Y, probablemente, cuando muera tampoco. Entonces, ¿Cómo lo supero? Y, no sé, por eso ahora estoy en una muy fea.
Tanatofobia
Tenerle miedo a la muerte y obsesionarse con eso tiene un nombre: tanatofobia. Primero jodía con mis amigos con que tenía eso. Jaja. Ahora creo que lo tengo de verdad.
(acá iría link citado a la definición de tanatofobia en wikipedia pero no me sale)
Hice lo que nunca hay que hacer en estos casos: googlear hasta el cansancio. Me metí en foros de reddit donde había testimonios de personas que estuvieron en el umbral de la muerte. Leí artículos médicos, entrevistas a metafísicos, reflexiones filosóficas. Miré la serie documental “sobrevivir a la muerte” en Netflix (maloncha, no la vean). Le pregunté reiteradas veces a chatGPT que hay después de la muerte y como se supera obsesionarse con ella. Casi me bloquea.
Empecé a leer un libro sobre una médica de cuidados paliativos (escuchen) que estuvo en el lecho de muerte de como 20 mil personas (sic) y asegura que todas pasan por la misma experiencia de que, en el umbral de la muerte, alguien los espera, que hay algo “más allá´”. Y que nuestro cuerpo es solo un caparazón para luego transformarnos en, conceptualmente, una mariposa. Esta vivencia terrenal es solo el principio de una mucho más especial y cósmica.
Ahora lo releo y digo mmm… Les conté a mis amigos y vi su cara de “Flor está finalmente pirando”. En el libro sonaba más convincente que como lo cuento, les juro. Fue una médica real, relevó miles de casos. Se llamaba Elizabeth Kubler Ross. Espero que sus libros no estén catalogados como de autoayuda (están).
Ahora terminé con un clásico: Muchas vidas, muchos maestros, de Brain Weiss. Acá, es la experiencia de un psiquiatra. Otro médico. Lo resalto para que vean que no son chantas. O bueno, si son chantas, son chantas con título. Acá Brian habla del caso de una paciente que le práctico terapia con hipnosis y ella fue capaz de hablarle de muchas vidas pasadas. Y no solo eso. Le pudo transmitir mensajes de los grandes maestros. Cosas de espiritus, karmas y equilibro cósmico. Me dijeron que siga con otro clásico “Saludar al sol: como perder el miedo a la muerte”.
Creo que es hora de que alguien me saque de esta falopa. En cualquier momento termino leyendo a Victor Sueiro. Pero bueno, en algo hay que creer, ¿No?
Vivir cada día como si fuera el último
Imagino una y otra vez el final. ¿Duele mucho? ¿Es todo negro? ¿Desaparecemos y chau picho para siempre? Y me dicen “no te acordás de como era no existir antes de que nacieras, esto va a ser igual”. Pero ahora sí estoy viva y pienso que, si este va a ser mi único paso por el universo, ¿Qué hago leyendo sobre el ex marido de pampita? ¿por qué almuerzo todos los días la misma ensalada aburrida? ¿Tengo que agarrar y viajar por el mundo, dormir lo menos posible y seguramente drogarme para dormir lo menos posible?
Hubo unas semanas que no podía hablar de otra cosa. Por eso ahora le digo la mword, porque mi psicóloga me dijo que deje de hablar del tema (¡juro que este texto es la última vez!)
Vivo rodeada de exceptivos. De gente no religiosa. De progres de clase media. La mayoría dice, obvio, que se te apaga la lamparita y listo. Que es mejor pensar eso, te saca presión. Es dormir para siempre y dejar de desear y también dejar de sufrir. Para la mayoría, que al final esté la muerte, es un alivio. Para mí, todavía, no.
Y esto que tiene que ver con el primer texto
El crush que me agarró cuando volví de viaje fue tan fuerte que todavía no salgo (pasaron seis meses). Las implicancias están a la vista: obsesionarse con la muerte es parte de esta crisis existencial. Ojalá pronto la supere. Imaginate vivir así hasta el día de tu muerte.
Me gustaría profundizar personalmente sobre el tema tanatofobia ya que mi contexto laboral por mas de 15 años fue ir de la funeraria al cementerio . Irme sin cumplir los objetivos que mi consciencia me va mostrando a medida que voy experimentando cronológicamente la dimension física del tiempo, a eso le tengo pánico de verdad.
Lo que si voy a profundizar es que así como los libros que leiste, cuales quiera que sean sus autores, editoriales, traducciones, formatos etc, funcionan igual que google/wikipedia : no solo no llegan nunca a absolutos salvo en lo absoluto de su interés propio a que conozcas esa información que estás buscando, bajo su interpretación y con un criterio formado.
No hay nada peor que google/wikipedia para transformar la ansiedad en pensamientos depresivos, ataques de panico, situaciones límite.
Me sucede, en alguna medida, algo parecido. Me obsesiono con cosas, en general, con todas las otras opciones que no fui. Cada tanto, pienso en que debería tomar alguno de esos caminos y ver qué pasa. Si fuera abogada, ¿lograría la trascendencia que no tengo?. ¿Porque no fui abogada? Porque una vez sentí el impulso de ser montajista y en lugar de seguir de largo, cambié de ruta. Y desde allí, todo el tiempo construyendo el andamiaje que no tenía cuando cambié de rumbo. A veces me contenta pensar que, aunque se sufre, es un gran valor tener la valentía de pensarse una y otra vez. De no aceptar sumisamente el hoy y el yo. De querer impulsivamente transformar el aquí y el ahora. Pero, seguramente ese rapto de optimismo también sea parte del mismo mecanismo. Kienlosabe?
Buen texto.
Por otro lado, ¿Mauricio Macri (MM) te filtra los textos? Salí de ahí maravilla.
Aplausos para este nuevo texto, Flor. Seguí purgando. ❤️